INTOLERANCIA ALIMENTARIA
Los alimentos, como moléculas extrañas al organismo ó “antígenos”, pueden provocar respuestas inmunitarias del mismo formando “anticuerpos”, fundamentalmente de dos clases: si se forman anticuerpos IgE, la respuesta inmunitaria es un proceso alérgico (más agresivo e inmediato); si se forman anticuerpos IgG, la respuesta es un proceso de intolerancia alimentaria (menos agresivo, insidioso y de manifestaciones variables). En éste último proceso, que nos ocupa, los anticuerpos IgG formados, se unen a los alimentos que los provocan (antígenos), formando inmunocomplejos circulantes; si la ingesta de éstos alimentos es repetida, los inmunocomplejos formados en gran cantidad, activan otros elementos del sistema inmunitario y provocan una inflamación tisular local que, en casos graves, puede abocar a una vasculitis. Ésta vasculitis, a nivel de los capilares glomerulares de las nefronas, puede aumentar la presión coloidosmótica del plasma sanguíneo y disminuir la filtración glomerular, provocar una intensa retención de líquidos y desencadenar edema, primero en el espacio extracelular y, en casos graves, también en el intracelular; ésto puede provocar un extraordinario aumento de peso, por retención de líquidos, sin que por ello ésta pueda considerarse una prueba única a realizar en la investigación de la obesidad, que puede obedecer a múltiples y variadas causas en su origen; de todos modos, forma ya parte habitual de cualquier investigación acerca de las causas de obesidad, sobretodo en pacientes con bajo consumo de calorías, en los que no se explica la ganancia exagerada de peso.
Se puede tener intolerancia a cualquier alimento de nuestra dieta
Un resultado positivo, viene expresado en el informe como moderado ó de positividad incierta (+), claramente positivo (++) y positivo intenso (+++), según sean los niveles detectados de IgG (IgG4) específica.
En principio, se deben suprimir de la dieta todos los alimentos que han resultado reactivos, cualquiera que sea su intensidad. Atendiendo al resultado y una vez transcurrido un período de un mes y medio, se puede reintroducir los alimentos del grupo moderado (+), a razón de uno por semana y observando los posibles efectos que se generen como consecuencia de la nueva ingesta, con la finalidad de reintroducirlo ó suprimirlo definitivamente. Los claramente positivos, se eliminan sin más de la dieta habitual.
TRASTORNOS RELACIONADOS CON LA INTOLERANCIA ALIMENTARIA:
· Trastornos gastro-intestinales (50%): Dolores abdominales, diarrea, inflamación, colon irritable, obesidad (por retención hídrica, en personas que no responden a dietas hipocalóricas).
· Enfermedades dermatológicas (16%): Acné, czema, psoriasis, rash, urticaria, prurito.
· Trastornos neurológicos (10%): Mareo, migraña, vértigo, dolor de cabeza.
· Procesos respiratorios (10%): Asma, rinitis, dificultad respiratoria (puede solparse a fenómeno alérgicos IgE mediados).
· Trastornos psicológicos (11%): Depresión,letargia, ansiedad, fatiga, náuseas, hiperactividad (niños hiperactivos).
· Otros (3%): Artritis, fibromialgia.